La maravillosa ciudad de Petra
Muy poco se conoce sobre Petra como destino turístico. Podría afirmar que mi primer acercamiento a este lugar fue a través de cuentas viajeras que sigo en Instagram. Generalmente, siempre se muestra sólo la fachada del Tesoro, pero Petra es mucho más que eso. Tan sólo al llegar al predio, hemos quedado impactados por la inmensidad del lugar. Consideramos que Petra es uno de esos lugares únicos, con una energía muy especial. Uno de esos destinos que hay que ver una vez en la vida. Por eso, aquí te contamos cómo organizar tu viaje y qué ver en Petra para aprovechar tu tiempo al máximo.

Cómo llegar a Petra
Al llegar a Jordania, alquilamos un auto para ir primero al desierto Wadi Rum y luego, dirigirnos a Petra (1 hora de distancia en auto). Si pueden alquilar auto, se los recomiendo porque te da una libertad de horarios y de movimiento sin igual. Las rutas en Jordania son buenas y las distancias son cortas al ser un país chico.
Otra opción más esconómica es trasladarse en bus desde Amman o Aqaba, las dos ciudades principales. Pueden chequear horarios y precios en la compania Jett Bus.
También es muy común en Jordania utilizar minibus privado o taxis. Los hoteles ofrecen distintas opciones de traslados privados o en taxi con gente local. Y en general, no es necesario hacer reservas con anticipación, pero aún asi les recomendamos consultar con tiempo una vez que tengan alojamiento reservado.

Historia de Petra
Si bien se desconoce exactamente cuando fue construída, Petra fue un próspero centro comercial y la capital del imperio nabateo entre el 400 a. y 106 d.C. Y se enriqueció con el comercio de incienso, mirra y especias.
Años más tarde, Petra se anexó al Imperio Romano y continuó prosperando hasta que un gran terremoto en el 363 d.C. destruyó gran parte de la ciudad. El terremoto, sumado a los cambios en las rutas comerciales, condujo a la caída de la ciudad, que finalmente fue abandonada.
A partir de allí, Petra parece haber estado en gran parte desierta y luego se perdió para todos, excepto para los beduinos locales del área. Hasta que en 1812, un explorador suizo llamado Johannes Burckhardt se dispuso a “redescubrir” Petra. Se vistió de árabe y convenció a un guía beduino para que lo llevara a la ciudad perdida. Después de esto, Petra se hizo cada vez más conocida en Occidente como una ciudad antigua fascinante, lo cual comenzó a atraer visitantes y continúa haciéndolo hasta hoy.
En 1985 Petra fue designada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y también fue elegida por la revista Smithsonian como uno de los 28 lugares que debes visitar antes de morir.

Dónde dormir en Petra
Nos alojamos en el hotel Infinity Lodge que es atendido por sus propios dueños y queda muy cerca de la ciudad de Petra. Es ideal para ir a pie al predio (aunque a la vuelta hay que subir unas calles un poco empinadas para seguir haciendo ejercicio luego de caminar todo el dia). El hotel tiene una decoración regional preciosa y tiene unas vistas de Petra maravillosas. Por otra parte, ofrece un desayuno increíble (incluído en el precio) y también ofrecen cena todas las noches, que hemos podido degustar una noche y recomendamos. sin dudas. Hemos leído muy buenas críticas de su gastronomía antes de llegar.

Ingreso a Petra
El ingreso a la ciudad de Petra es pago y el costo varía dependiendo la cantidad de días que quieran ingresar. Recomiendo consultar los precios de los tickets de Petra. Desde nuestra experiencia, le dedicaría mínimo 2 días para ver lo más destacado, ya que el lugar es grande y en un día no harías a tiempo a verlo todo. Nosotros sacamos el ticket de 3 días y el tercer día si bien aún teníamos cosas pendientes para ver, teníamos que emprender camino temprano hacia nuestro siguiente destino. Por lo tanto, el tercer día sólo ingresamos unas horas a despedirnos del lugar y subir nuevamente al mirador del Tesoro para tomar un té beduino con la gente local que tan bien nos había tratado cuando fuimos.
Qué ver en Petra – Lo más destacado
El Siq, un imprescindible que ver en Petra
El Siq es la primera atracción que encontrarás al iniciar el recorrido del predio. Es la antigua entrada principal que conduce a la ciudad de Petra. Este camino de poco más de 1 km de longitud, está rodeado de altísimos acantilados que generan la sensación de estar caminando dentro de un laberinto. Este encantador paseo termina frente a la famosa fachada del tesoro. La parte principal del Siq está creada por formaciones de rocas naturales y el resto está tallado por los nabateos.
A ambos lados del Siq hay canales para sacar agua de Wadi Musa (el pueblo cercano a Petra), desde fuera de la ciudad hacia el interior.


El Tesoro, otro imperdible que ver en Petra
Sin dudas, el edificio más famoso de la antigua ciudad de Petra es el Tesoro, el que se lleva la portada de todas las postales. Una vez que termines tu recorrido por el Siq, te encontrarás con la fachada del Tesoro que es el epicentro de la antigua ciudad de Petra. arias escenas de la película Indiana Jones y la última cruzada fueron filmadas en la ciudad de Petra, incluyendo múltiples secuencias enfrente de la fachada de El Tesoro. Posiblemente le deba parte de su fama a la película de Indiana Jones y la última cruzada donde fueron filmadas múltiples escenas frente a la fachada de El Tesoro. Es allí donde se concentran la mayor cantidad de turistas y al llegar, seguro serás asechado por locales para ofrecerte subir a algunos de los miradores y ver el Tesoro desde otra perspectiva.

Mirador del Tesoro
Si el Tesoro es el lugar más famoso de Petra, el mirador es imperdible al tener una vista privilegiada de la fachada del tesoro y sus alrededores. Por eso, les recomendamos subir a algunos de los 2 cafés que están frente al Tesoro para verlo desde la altura. Aquí debo aclarar que sólo podrán subir con un guía local, no sólo porque no encontrarán el camino al intentar subir por su cuenta (no está señalizado). Pero además los guías locales estarán atentos a que nadie suba sin su compañía, por lo que tendrás que regatear con ellos un precio accesible para subir. Nosotros el segundo día nos topamos con un guía en la puerta del predio que nos invitó a hacer un recorrido alternativo (obviando el Siq que ya habíamos recorrido el primer día) y terminar con la subida al mirador para ver el Tesoro desde la altura. Les recomendamos al gu (IG) y puedo pasarles su teléfono en privado.



Teatro Romano
Luego del Siq y el Tesoro, seguirás camino por la Calle de las Fachadas que alberga algunos de los edificios destacados de Petra, como las Tumbas Reales y el Teatro Romano. Pero las fachadas por las que esta calle recibe su nombre no son otra cosa que las tumbas nabateas y cuevas talladas en las paredes de piedra. Lo curioso de Petra es que en muchas de estas cuevas aún sigue viviendo gente local, los famosos beduinos. Los reconocerás rápidamente por su pañuelo en la cabeza y sus ojos delineados con kohl para protegerse del sol.


Tumbas Reales
LLegando al final de la calle principal, ubnos metros después del Teatro Romano, se encuentran las Tumbas Reales. Nosotros las visitamos al atardecer y frente a las tumbas se dejaba ver una puesta del sol para el recuerdo. Así que si les dan los tiempos, les sugerimos dejar esta parte para el final del día.


El Gran Templo
Si siguen camino, encontrarán otros edificios de la ciudad de Petra. Y el que más les llamará la atención por su tamaño es El Gran Templo. Se trata de uno de los mayores conjuntos arqueológicos de la ciudad Perdida, construido a finales del siglo I a.C. Su característica más singular son sus imponentes columnas. Alrededor de este edificio vimos un grupo importante de cabras merodeando. Entre los camellos que transitan la calle, los beduinos con su tradicional vestimenta y los paisajes de otro planeta, realmente sientes que estas dentro en una película.

El Monasterio
Otro lugar imperdible de Petra es el Monasterio, también conocido por su nombre en arabe Al-Deir. El mismo se encuentra en la otra punta de Petra, en oposición al Siq. Por lo tanto, hay que recorrer prácticamente todo el predio para llegar hasta el comienzo de la subida hacia el Monasterio. Para llegar hasta la fachada de este edificio, hay que hacerlo a través de un camino de 800 escalones (se tarda entre 30 y 45 minutos). El trayecto no es difícil y aunque puede resultar cansador, se disfruta mucho por las vistas panorámicas que regala a cada paso. Se pueden hacer algunas paradas técnicas durante el camino, de ser necesario. Además de los bellísimos paisajes de Petra, es habitual cruzarse burros o camellos, ya que muchos locales los utilizan para trasladarse y también ofrecen este servicio a los turistas. Y hay tiendas beduinas en algunos tramos del camino, vendiendo el clásico té beduino, productos locales (como alfombras o indumentaria) y souvenirs.

Si siguen caminando luego del Monasterio van a encontrarse con paisajes impresionantes y hay algunos miradores con vistas panorámicas imperdibles. Estan señalizados en el camino, algunos son bares donde puede degustar un té beduino o alguna otra especialidad local.


Petra by Night
Si tu estadía concide con los días que se realiza Petra by Night, les recomiendo asistir a este evento (ver días y precios de los tickets para Petra by Night). Es una experiencia que merece la pena para ver Petra bajo la luz de la Luna y a la tenue luz de las velas. La única contra es que hay que pagar la entrada aparte, no puedes ingresar con el mismo pase de Petra. Si me preguntan mi opinión, diría que Petra by Night no es imprescindible, pero considerando que no hay muchas otras atracciones nocturnas, si está dentro de su presupuesto, se los recomiendo. Es algo pintoresco y distinto para ver. Si te enamoró Petra de día, seguramente de noche también te atrapará.



¿Qué más ver en Petra?
Altar de los Sacrificios
Mucha gente deja este trayecto para el segundo o tercer día porque lleva mucho tiempo y el camino es cansador. Hay varias formas de subir hasta el punto más alto de Petra, conocido como el Altar de los Sacrificios (Jebel Al Madbah). La primera opción es hacer todo un recorrido que comienza desde la entrada de Petra, antes del Siq. Sin embargo, al ser un camino que no está señalizado, sólo es posible hacerlo con un guía local.
Por otra parte, se puede subir a través de un camino empinado que comienza al final de la Calle de las fachadas, un poco antes de llegar al Teatro de mano izquierda. Está bien señalizado y no es muy frecuentado por el esfuerzo que representa la subida (entre 1:45 y 2 horas). Al llegar hay dos altares, en el principal se recogía la sangre de los sacrificios. En la antiguedad, hasta allí subían camellos, burros y otros animales para ser ofrecisos a los dioses. Este lugar era considerado un punto astrológico importante dentro de la ciudad.
Ruta Wadi Al-Farasa
Desde el Altar del los Sacrificios el sendero continúa montaña abajo, descendiendo por estrechas escaleras que van pasando por otras tumbas y templos muy bien conservadas como el Templo del Jardín y el Triclinio. La ruta continúa hasta aparecer por la parte superior del pequeño teatro romano que se encuentra junto al Gran Templo.
Little Petra
Si aún te sobra tiempo, puedes visitar Little Petra. Está algo alejada de la ciudad de Petra, por eso, mucha gente no llega a conocerla. Se trata de un lugar con construcciones similares a las de Petra pero mucho más pequeño. Se puede recorrer en aproximadamente 1 hora y media.

¿Con qué otros destinos combinar Petra?
Jordania es un país pequeño y fácil de recorrer en poco tiempo. En un clásico viaje por Jordania se suele recorrer el desierto de Wadi Rum, el Mar Muerto, la capital Amman y Aqaba si quieres unos días de playa.
Si tienes más tiempo de viaje, es un destino que se puede combinar fácilmente con otros países cercanos como Egipto, Israel o un poco más lejos, Turquía.
Un comentario en “Qué ver en Petra, la maravillosa ciudad perdida”